Las vacaciones, el fin de semana, el verano… si algo tiene. en común todo estos, es que llevan la palabra desconexión. Son días (o semanas, para los más afortunados) en las que nos ponemos en modo off.
Pero si lo que buscamos es desconectar al 100% y quitarnos esas tensiones de la semana, no es necesario esperar a tachar esos días de la semana. Hoy te vamos a dar unos consejos que te pueden ayudar en tu día a día para que no solo esperes al fin de semana para desconectar. Vas a aprender o trataremos de que aprendas a sentirte bien, ya que todos estos consejos son salud.
Así que toma nota y arriba ese ánimo, que cualquier día puede ser bueno para desconectar.
1. Pasea. Un paseo de media hora, puede resultar una auténtica meditación, además si puedes disfrutar de la naturaleza o de un entorno que te guste y aprender a conectar con él y sus sensaciones, puede ser una experiencia muy gratificante.
2. Retomar aficiones. Aprovecha al máximo tu tiempo libre. Poner en practica algún hobby que tengas en el trastero puede ser muy placentero: escribir, dibujar, música, etc.
3. Respira. Una buena respiración pausada y el silencio; encontrarse con uno mismo puede ser de lo más placentero si sabes cómo hacerlo, solo tienes que concentrarte en tu respiración y poner la mente en blanco. No es fácil pero si se consigue encontrarás la paz.
4. Practica la solidaridad. Dar el paso de ser amable hará que poquito a poquito empiece a formar parte de ti. Lo importante es no esperar nada a cambio. No hacen falta gestos extraordinarios: ayudar a tu familia, dar un consejo, decir gracias y adiós.
5. Autocompasión. No te ignores y critiques, sé bondadosa contigo misma. Mímate, cuídate, busca aquello que te haga sentir mejor.
6. Atención al 100% en la mesa. Disfruta de cada bocado, nota los sabores, te ayudará a disfrutar de los pequeños placeres.
7. Medita. Es importante que le dediques unos minutos al día. Siéntate en un lugar silencioso, cierra los ojos y pon el foco en ti misma. Como dijimos antes, es la base de todo y muy importante que busques tu forma particular de meditar. No tiene porqué ser en silencio haciendo la posición al sol, para nada, un momento de meditación puede ser cualquier cosa que nos haga desconectar y llegar al estado de tener la mente en blanco, sin preocupación.
8. No trabajes en casa hasta tarde; si es necesario que lleves trabajo a casa, ponte un horario razonable, cúmplelo y no termines justo antes de irte a la cama.
La vida está para vivirla y no para sufrirla, el trabajo es una actividad más de tu vida, ¡no dejes que sea lo único! Cuida a tus seres queridos, amigos, familia, comparte el tiempo, disfruta y vive.
¿¿Estás dispuesto a vivir??
¡¡Empieza Ya!!