El perdón es un largo proceso durante el cual se pasa por diferentes etapas, cada una de las cuales es esencial para ser realmente capaces de superar la brecha creada por la infidelidad. Para entender como llegar al perdón es necesario comprender lo que realmente es, de hecho, a menudo éste se tiende a confundir con la reconciliación pero son dos actos bien distintos.

Perdonar es ser capaz de ver las limitaciones de los que nos hacen daño, es una dimensión más real, es un acto que requiere profundo equilibrio interior y la aceptación plena de los demás. Comprender y aceptar los defectos y debilidades de los demás nos permite convivir mejor con el resto de personas.

Perdonar no es olvidar, sino asegurarse de que el pasado no continúa haciéndonos daño, hay que recordar pero sin dolor. En esta perspectiva, el perdón no es algo que necesitan los que nos han ofendido para deshacerse de sus responsabilidades pero sí es el primer paso.

No es fácil conseguir esto, muy a menudo pensamos que hemos perdonado y esto no es cierto, para disculpar una infidelidad hay que completar una serie de pasos, ya que ésta es una lesión muy profunda y personal, casi comparable a un duelo real.

En la etapa temprana del descubrimiento de la misma es muy complicado olvidar la traición, esto es como decirle a una persona que ha sufrido una pérdida que se olvide de quien se ha ido.

La fase emocional del dolor y la ira son necesarias tras el descubrimiento de la infidelidad, al mismo tiempo, la persona que fue infiel debe permitir que la víctima que fue traicionada exprese fuertemente todo el dolor y la ira que tiene en su interior.

Si la persona autora de la infidelidad se dedica a dar explicaciones racionales del motivo, no está haciendo otra cosa más que amplificar el dolor y la ira de la víctima, sólo después de haberse atenuado la etapa emocional descrita, puede comunicarse con su pareja y preguntar por qué sucedió.

Por lo tanto sólo tras la fase emocional es cuando realmente se puede perdonar, el perdón nunca suele ser total, la herida sigue estando y necesita su tiempo para sanar, por lo tanto hay que tener en cuenta que es un proceso largo y doloroso.